Los romances son poemas épico-líricos formados por un número indefinido de versos octosílabos que riman en asonante en los pares. Son narrativos, es decir, cuentan una historia, y se cantaban acompañados por un instrumento. Adquirieron mucha importancia en la Península Ibérica durante los siglos XIV y XV,y eso sumado a su originalidad hace que se consideren un elemento muy representativo de la poesía popular.
Abenámar y el rey don Juan
— ¡Abenámar, Abenámar,
moro de la morería,
el día que tú naciste
grandes señales había!
Estaba la mar en calma,
la luna estaba crecida;
moro que en tal signo nace,
no debe decir mentira.»
Allí respondiera el moro,
bien oiréis lo que decía:
Yo te la diré, señor,
aunque me cueste la vida,
porque soy hijo de un moro
y una cristiana cautiva;
siendo yo niño y muchacho
mi madre me lo decía:
que mentira no dijese,
que era grande villanía:
por tanto pregunta, rey,
que la verdad te diría.
—Yo te agradezco, Abenámar,
aquesta tu cortesía.
¿Qué castillos son aquéllos?
¡Altos son y relucían!»
—El Alhambra era, señor,
y la otra la mezquita;
los otros los Alixares,
labrados a maravilla.
El moro que los labraba
cien doblas ganaba al día
y el día que no los labra
otras tantas se perdía.
El otro es Generalife,
huerta que par no tenía;
el otro Torres Bermejas,
castillo de gran valía.»
Allí habló el rey don Juan,
bien oiréis lo que decía:
—Si tú quisieras, Granada,
contigo me casaría;
daréte en arras y dote
a Córdoba y a Sevilla.»
—Casada soy, rey don Juan,
casada soy, que no viuda;
el moro que a mí me tiene
muy grande bien me quería.»
Fontefrida
Fontefrida, Fontefrida
Fontefrida y con amor,
do todas las
van tomar consolación,
sino es la
que está viuda y con dolor.
Por ahí fuera a pasar
el traidor del
las palabras que le dice
llenas son de traición:
«Si tú quisieses, señora,
yo sería tu servidor.»
«Vete de ahí, enemigo,
malo, falso, engañador,
que ni poso en ramo verde
ni en ramo que tenga flor,
que si el agua hallo clara
la bebiera yo;
que no quiero haber marido
porque hijos no haya, no;
no quiero con ellos
ni menos
¡Déjame triste, enemigo,
malo, falso, mal traidor;
que no quiero ser tu amiga
ni casar contigo, no!»
Mi amor
Me enamoré de su sonrisa
mi debilidad, su risa
tenía miedo a perderla
yo solo quiero tenerla.
Y yo te quiero a mi lado,
llegaste con tranquilidad,
eres el sol de mi mundo
te amo desde lo mas profundo
Para ti solo amaré
y nunca te mentiré
pero por ti aguantaré
y si hace falta moriré.


